Mémoire sur la découverte du Magnétisme animal
1779, Frédéric-Antoine Mesmer
El nombre de MESMER es conocido en todo el mundo desde el siglo XVIII, principalmente por las investigaciones que publicó sobre la sanación mediante el magnetismo.
Quise poner aquí a disposición una digitalización en color de la versión original en francés antiguo de 1779. Es un poco difícil de leer, pero personalmente, me encanta el encanto de los libros antiguos. Para quienes lo prefieran, una versión en texto modernizado en francés de esta obra está disponible en: Wikisource.org.
Desafortunadamente, el nombre de Mesmer suele asociarse con los charlatanes de aquella época, y por eso quise subrayar aquí que este ser inmortal es un gran Maestro de la Logia Blanca que, en el siglo XVII, antes de llevar el nombre de Mesmer, llevaba el nombre de Conde de Cagliostro. Lo que sigue son pasajes en los que el Maestro Judas Iscariote, así como el Maestro Samael Aun Weor, hablan sobre este gran ser enigmático.
Fragmento del libro “El Vuelo de la Serpiente Emplumada”
A. Cosani — ¿Qué es lo que ignoramos?
V.M. Judas Iscariote — Un hecho muy sencillo que en realidad es una verdad física, pero que todos ustedes creen que se trata únicamente de un precepto ético imposible de llevar a la práctica. Seguramente lo habrás leído u oído alguna vez: No resistáis el mal.
Todos estos preceptos fueron dados al mundo por verdaderos sabios. Sólo un puñado de seres en la historia de la humanidad han podido descubrir que son verdades realmente científicas. La ciencia ordinaria, por cierto, negará esto porque cree que la ética es algo separado de lo que llama materia, sin advertir que es justamente lo que condiciona y vivifica la materia y hasta crea sus formas. Hace mucho tiempo hubo un verdadero sabio entre los hombres de ciencia y se llamó Mesmer. La ciencia, o eso que llaman ciencia, lo persiguió y sus trabajos han sido ignorados. Es el destino de todo aquel que descubre la verdad. Hoy día el mesmerismo pasa por una forma de charlatanería, y lo curioso es que son justamente los charlatanes de la ciencia quienes más peroran contra la “charlatanería” de Mesmer. Algunos que han estudiado a Mesmer para hacer curaciones magnéticas se han aproximado a la verdad que él dejó oculta en sus aforismos. Pero solamente unos cuantos, muy pocos, han advertido que lo que es sí también puede ser no, que el sí es una verdad relativa al no, como lo bueno es relativo a lo malo. Pero ya tendrás oportunidad de enterarte de esto porque al fin me has hecho una pregunta que vale la pena.

Fragmento del libro “Mensaje de Acuario”
por el V.M. Samael Aun Weor
Otro personaje maravilloso fue el poderoso y enigmático Conde Cagliostro. Este hombre de edad indescifrable es un verdadero Maestro que tiene el Elixir de Larga Vida.
Nadie puede tener este elixir sin haber trabajado con el Arcano A.Z.F.
Cagliostro tragó tierra entre el sepulcro, y se escapó de la fosa sepulcral porque había recibido el Elixir de Larga Vida.
Cagliostro practicó magia sexual intensamente.
Cagliostro fue discípulo del Conde Saint Germain. Cagliostro fue alquimista. Transmutaba el plomo en oro y fabricaba diamantes legítimos. A este Maestro se le conoció en distintos lugares del mundo. A veces usaba en un país un nombre, en otros usaba otro, etc.
Se le conoció con los nombres de Tis-chio, Milissa, Belmonte, D’anna, Fénix, Pellegrini, Bálsamo, Mésmer, Harut y Cagliostro, según consta en el famoso proceso sobre El Collar de la Reina, título éste de una obra de Alejandro Dumas. Ragón comete el crimen de calumniar al Gran Copto.
Eliphas Levi también calumnia al Conde Cagliostro acusándolo de mago negro. El Gran Copto convivió con el famoso Schrader en Alemania, y en Inglaterra con el insigne teósofo Georges Coston.
Con su ciencia de la Piedra Filosofal, Cagliostro le salvó la vida al Arzobispo de Rohan.
La Baronesa de Oberkirch dijo del Gran Copto lo siguiente:
“No era absolutamente bello; pero jamás vi fisonomía igual. Su mirada, más que profunda, era sobrenatural.
Yo no sabría definir la expresión de sus ojos: eran, al par, el hielo y el fuego, influenciando de un modo irresistible; ya atrayendo, ya repeliendo”.
En Estrasburgo tuvo muchos discípulos alquimistas. Ca-gliostro fue juzgado por la Inquisición, encerrado en la Bastilla, y después en la Fortaleza de Leone. La Inquisición lo condenó a muerte, pero el enigmático y poderoso Conde Cagliostro desapareció de la prisión misteriosamente.
La muerte no pudo contra Cagliostro. Cagliostro todavía vive con su mismo cuerpo físico, porque cuando un Maestro ha tragado tierra entre el sepulcro, es señor de los vivos y de los muertos.